El ministro de Hacienda de El Salvador, Alejandro Zelaya, informó hoy que el Gobierno de Nayib Bukele prepara la primera emisión de bonos en criptomoneda para financiar Bitcoin City, justo en el día que el bitcoin cumple seis meses como moneda de curso legal en el país.
«Los primeros 15 días de marzo tenemos programado terminar con todo lo necesario para que se emita el bono. Estamos tomando todas las salvaguardas», aseguró Zelaya.
La emisión de los «Bonos Volcán» servirá -según el gobierno- para financiar el proyecto Bitcoin City, anunciado por Bukele en noviembre de 2021 durante el cierre del evento Bitcoin Week, que se llevó a cabo en el país.
La ciudad bitcoin, de acuerdo con el mandatario, se construirá cerca del volcán Conchagua, en el departamento de La Unión, para aprovechar su energía para alimentar la ciudad y el minado del bitcoin, ya que la urbe contará con áreas residenciales y comerciales, y estará dotada de servicios, áreas de entretenimiento, restaurantes, aeropuerto, puerto y estación de tren.
El bitcoin, según Bukele
«Gracias al bitcoin ustedes han visto la cantidad de inversionistas, la cantidad de turistas, la cantidad de personas que están viniendo incluso a vivir a El Salvador», afirmó Bukele durante un evento en el que inauguró la ampliación del aeropuerto internacional a inicios de febrero.
El 20 de febrero el mandatario salvadoreño anunció en su cuenta de Twitter que había enviado a la Asamblea Legislativa un pliego de reformas relacionadas con nuevas inversiones.
«Estoy enviando 52 reformas legales al Congreso para eliminar burocracia, crear incentivos fiscales, ciudadanía a cambio de inversiones, nuevas leyes de valores, contratos de estabilidad», escribió.
Sin embargo, la Asamblea Legislativa aún no ha aprobado las reformas, a pesar de que Nuevas Ideas, el partido de Bukele, tiene amplia mayoría.
«Esa falta de aprobación del marco jurídico que regulará la emisión y venta de los bonos puede generar incertidumbre a los posibles inversionistas», consideró Ricardo Castaneda, economista y coordinador para El Salvador y Honduras del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi).
«No está claro si se va a crear una especie de bolsa de valores en El Salvador donde se emitirían estos bonos o en qué otro país se va a hacer», agregó.
Primera emisión de bonos en bitcoin
«Hay que cumplir con toda la normativa de emisión de títulos valores, de un bono soberano; hay verificación de los flujos de efectivo de los compradores de los bonos porque tampoco puedo yo venderle mi bono soberano a alguien que está en una actividad ilícita», explicó el titular de Hacienda, Alejandro Zelaya, sobre la emisión de bonos en bitcoin.
Por su parte, Castaneda señaló: «La realidad es que esta nueva iniciativa podría abrirle un nuevo camino de financiamiento a El Salvador o complicarle mucho más el panorama si fracasa su venta».
«Si la demanda de esos bonos duplica o triplica la oferta de estos, será una forma de medir su efectividad. Es decir, si la emisión va a ser de 1.000 millones, debería de haber por lo menos dos mil o tres mil millones de personas que estuvieran dispuestos a comprarlos», opinó el economista.
Castaneda sostuvo que, si ese escenario se cumpliera, demostraría que El Salvador «encontró una fuente de financiamiento alternativa a los organismos multilaterales».
«De lo contrario, tendría que descartar esa opción y se encenderían las alertas rojas de un posible impago, ya que este año y el siguiente el país debe amortizar préstamos internacionales”, advirtió.
El Salvador negocia con el FMI
Actualmente, el gobierno de El Salvador también negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un préstamo por US$ 1.000 millones, sin que hasta ahora haya acuerdo para el desembolso.
De hecho, el organismo multilateral considera que el uso del bitcoin como moneda de curso legal implica «grandes riesgos» debido a su alta volatilidad.
Es más, sugiere «limitar el alcance de la ley» y urge «a fortalecer la regulación y supervisión del sistema de pagos».
El gobierno de El Salvador, no obstante, dejó más que claro que no está de acuerdo con estas apreciaciones.
El FMI, en un informe de noviembre de 2021, advirtió a El Salvador sobre el posible crecimiento de la deuda pública «superior al 95% del Producto Interno Bruto (PIB) hacia 2026, debido a la ausencia de medidas decisivas de política económica para corregir los desequilibrios fiscales y aliviar estas limitantes al crecimiento».